sábado, 18 de febrero de 2012

EL PORQUÉ DE ESTE 7 DE NOVIEMBRE

Como a todos, los días nos pueden venir bien, mal, regular, decir que nos hemos levantado con el pie izquierdo es fácil para empezar un día nada normal. Somos siempre jueces de lo malo que nos pasa y por el contrario nunca o casi nunca valoramos lo bueno que nos viene por muy pequeño e insignificante que sea.
Pienso y creo que siempre deberíamos agradecer a nuestro dios particular sea quien sea y lleve el nombre que lleve, el especial momento que es, el de despertarse y ver que seguimos un día mas con aquellos que queremos, con nuestro trabajo lo haya o no, con nuestras in-comodidades de tener agua caliente, un desayuno, un refugio, alguien que te diga por la mañana buenos días, aunque éste sea atronador ahí afuera. No somos conscientes de que el mundo está conectado de cierta forma y manera con nosotros, el universo, ESE QUE ES TAN GRANDE, que lo vemos desde una ínfima parte del mismo y que nunca se piensa en que cada ser humano, aunque seamos el nº x de millones de humanos siempre habrá sitio para unos cuantos más. Porque al igual que unos lo dejan, otros aparecen.
Esto que suena como a una clase de embrollo monumental es simplemente a que mi día de hoy, SIN QUERER PENSARLO, solo VIVIENDOLO cada minuto, de forma inesperada ha sido de lo mas...Hm. ...de lo mas... agradecido conmigo, me ha devuelto ESO que dicen que se siembre se recoge. Gracias a mi dios, a su vida, a la confianza que deposita en mi cada mañana, hoy recibo regalo. También y no por mi nombre que me compaña desde pequeñita, tengo suerte, porque la vida a pesar de dar bofetadas de vez en cuando también suele y digo suele regalarme con cosas especiales como la de hoy. Empiezas la semana, Lunes, quedan 4 o 5 días para ser fin de semana, eso depende de cada cual. El día te dice a gritos! Reunion en el ayuntamiento!!! pi pi pi pi pi piiiiii, ya vamos atabaleados y eso que no hemos tocado el café de la mañana, luego nervios de uno que se olvida de algo, vuelta a casa, otro que se olvida de un papel, los nervios hacen que tengas que acudir a Roca en el ultimo segundo. Cargada, coche, el día maravilloso...sería acaso la noticia de la noche anterior en el parte meteorológico??? Algo tiene que ver SI. El cielo limpio, claro, azul. Y ese calorcillo de meses pasados. Llegamos, tengo que decirle a alguien que se llama INEM que sigo engrosando sus filas otro mes mas...pero no importa porque la maquinita no quiere ver mis deditos en ella, así que no puedo dejar constancia. Lo intenté juro Sr. Juez que lo intenté pero nada de nada. Así que en la oficina del mismo que tenemos en  el ayuntamiento Lucia se pone manos a la obra, arreglado, de otro modo pero algo menos de que preocuparse. Pasamos a fase II, retoques de la próxima exposición, cuadros, dibujos, parece que todo va bien, con Lola, nuestra querida Lola es imposible que algo vaya mal.
Charlas interminables de ultima hora y cuando se puede y pueden se tienen, esas que son tan agradables, tan placenteras. Y es aquí donde comienza la fiesta de regalos y que es un inciso de lo que me ha pasado.
Las cosas vienen a tu vida por algo, actúas por algo, que es cierto que se disipa en segundos y hacemos las cosas habituales sin volver a las insignificancias del destino.
Somos como la memoria de os peces, en un segundo olvidamos que estamos vivos y no lo sentimos pero…llega la frase de “si quieres yo conozco a alguien que…y una asociación que…” los ojos se iluminan de tal modo que cruzan fuegos, cenizas, brasas y volcanes…AHÍ ESTÁ MI DIA. La frase de la felicidad. Y al salir sol, calor, sin pensar… A COMER A LA PLAYA, dicho y hecho, tapper, botella, y allá que nos vamos en mi pequeño coche “ contigo  al fin del mundo” decía el anuncio, perece ser que si, mi peugeot nos lleva al fin del mundo, dentro de nuestra propia isla. Cualquiera nos sirve, da igual, hay sol, aunque es un poco tarde ya. Nadie en la playa, solo el agua queda y las ínfimas olitas de la orilla, cielo azul, verde pinar, agua limpia y paz, tranquilidad. Tomarse tiempo para comer es un lujo hoy en día, sin coches, ni humos ni stres. El mar, y yo. El cargador universal natural de las pilas humanas. El mejor el mas rápido, económico, sano, agradecido. Poco a poco nos llenamos de esa energía que solo la verdadera naturaleza puede proporcionar. Sentada en la orilla, en la arena, escuchando solo escuchando…
Pero todo llega y tenemos que irnos, la temperatura va cayendo como cae la tarde, las luces, las sombras se hacen mas evidentemente frías y nos marchamos. No importa nos tenemos eso es lo mas importante, si estoy mal vengo, si la extraño aquí esta. Y para que quede constancia añado pruebas fehacientes de ello.

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